Golazo - 13/7/18 - 01:45 PM

Turín está convulsionada con la llegada de Cristiano Ronaldo

Los comerciantes no pierden la oportunidad de explotar la popularidad del portugués, que la Juve compró en 112 millones de euros en la esperanza de que la ayude a ganar el trofeo que se le niega: la Liga de Campeones.

 

Por: Italia/AP -

Helados con sabor a CR7, pizza CR7, grandes colas para comprar su camiseta: Turín está convulsionada con la inminente llegada de Cristiano Ronaldo, flamante adquisición de Juventus.

Los comerciantes no pierden la oportunidad de explotar la popularidad del portugués, que la Juve compró en 112 millones de euros en la esperanza de que la ayude a ganar el trofeo que se le niega: la Liga de Campeones.

Leonardo La Porta, propietario de la Gelateria Miretti en el corazón de la ciudad, creó un sabor llamado CR7. No es hincha de la Juve y ni siquiera un apasionado del fútbol, pero acostumbra a inventar sabores alusivos a grandes eventos que tienen lugar en la ciudad.

Dijo que buscó un sabor que representase la unión de Turín y Portugal.

“Empecé a venderlo el 7/7 porque se decía que ese día iba a ser presentado Cristiano Ronaldo”, dijo La Porta a la Associated Press. “Lo creé una semana antes. Hice una intensa investigación”.

“Usamos un licor portugués típico, Ginja. Aquí en el Piamonte tenemos algo parecido. En Portugal se sirve con una taza de chocolate, por lo que el helado tiene leche, crema, azúcar, harina de algarrobo, este licor Ginja y pedazos de chocolate”.

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Cerca de la heladería hay una pizzería que también sueña con ser visitada por el astro.

Tommy Tegamino, dueño de dos abonos anuales de la Juve, y los hermanos Filippo y Tommaso Crozaso, ofrecen ahora una "Pizza CR7", con queso stracchino y aceitunas negras que dan forma al número siete del jugador. El queso y las aceitunas reproducen los colores blanco y negro del club.

La pizza cuesta siete euros (8,17 dólares).

“¡Ojalá (Cristiano) venga!”, dijo entre risas Sara Giulia Peira, administradora de uno de los tres locales de la pizzería.

A muchos turineses les cuesta creer que Cristiano está viniendo a la Juve.

Raimondo Livolsi, obrero de 37 años, dijo que pensó que la noticia “era una broma”.

Enrico Tolve, maestro de escuela de 59 años de Foggia, que visitaba Turín, estaba comprando una camiseta del jugador para su sobrino.

“Ahora nadie tiene esperanza alguna, ni en Italia ni en Europa”, aseguró. “La Liga de Campeones es nuestra. 100%”.

Juventus se consagró campeón de Italia las últimas siete temporadas, pero no conquista la Champions desde 1996.

Las camisetas de Cristiano vuelan. La tienda oficial de la Juve en Milán calcula que se vende una por minuto.

Algunos aficionados, no obstante, no ven con buenos ojos la llegada de Cristiano a un precio tan alto en momentos en que hay serios conflictos laborales con la empresa automotriz Fiat, propiedad de la familia Agnelli, dueña también de la Juve.

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