Ataque de disidencias de las FARC deja siete heridos en el centro de Colombia
Las autoridades regionales ofrecieron una recompensan de 20 millones de pesos (unos 6.140 dólares) para dar con el paradero de los responsables de la explosión.
La explosión de un artefacto al parecer instalado por disidentes de las FARC en el municipio de Uribe, ubicado en el centro del país y uno de los más afectados durante décadas por el conflicto armado, dejó este jueves cinco civiles y dos militares heridos, informaron fuentes oficiales.
"A las 11 de la mañana estalló un artefacto en un polideportivo del centro de esta población, que afectó a cinco civiles, de ellos cuatro adultos y un menor de edad, y también a dos miembros del Ejército", indicó Gerardo León Mancera, secretario de Gobierno del departamento del Meta, del cual hace parte Uribe.
El alcalde de Uribe, Jaime Pacheco, sostuvo que el ataque ocurrió "en pleno centro del municipio", zona en donde funcionan la mayoría de entidades oficiales y establecimientos comerciales de la localidad.
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Según la investigación, con base en un vídeo captado en una cámara de seguridad se pudo determinar que un paquete sospechoso fue dejado en la esquina del polideportivo y activado a control remoto al paso de los uniformados.
Mancera rechazó lo ocurrido e indicó que debido a las heridas los soldados fueron "trasladados vía aérea a la ciudad de Villavicencio", capital del Meta, para ser atendidos.
Los comandantes de la Cuarta División del Ejército, Sergio Alberto Tafur, y de la Séptima Brigada de la institución, Erik Rodríguez, se desplazaron hacia la localidad acompañados de los organismos de inteligencia que realizarán la investigación y el seguimiento al caso para esclarecer los hechos.
Las autoridades regionales ofrecieron una recompensan de 20 millones de pesos (unos 6.140 dólares) para dar con el paradero de los responsables de la explosión, que se presume hacen parte de las disidencias de las FARC.
Por años, Uribe fue escenario de cruentos enfrentamientos entre las FARC y las autoridades colombianas.
De hecho, en este municipio la guerrilla instaló en la década de los años 70 Casa Verde, considerado el "santuario" de ese grupo al margen de la ley.
El 9 de diciembre de 1990, el Gobierno del presidente César Gaviria Trujillo ordenó atacar "Casa Verde" para desarticular la cúpula de las FARC, la cual, sin embargo, huyó del sitio.