Justicia argentina ordena liberar al exvicepresidente acusado de corrupción
El Tribunal de apelaciones de la Cámara Federal ordenó excarcelar a Boudou por en el proceso que investiga las facturaciones de gastos en viajes al exterior cuando fue ministro de Economía (2009-2011).
La Justicia argentina decretó este viernes la "inmediata" salida en libertad del exvicepresidente del país Amado Boudou (2011-2015), procesado en dos causas por supuesta presentación de facturas falsas y por lavado dinero, según un fallo al que tuvo acceso Efe.
El Tribunal de apelaciones de la Cámara Federal ordenó excarcelar a Boudou por en el proceso que investiga las facturaciones de gastos en viajes al exterior cuando fue ministro de Economía (2009-2011), tras haberlo hecho ayer en el caso de enriquecimiento ilícito mediante lavado de dinero, dos causas que lo mantenían en prisión preventiva.
El abogado del exvicepresidente, Eduardo Marañona, afirmó en el canal TN que el tribunal tuvo en cuenta el argumento que esgrimió desde su arresto el pasado 3 de noviembre, "que no se daban las condiciones para una detención de la noche a la mañana de una persona que lleva sometida a proceso cinco años".
La Cámara valoró que en ese tiempo Boudou siempre se presentó ante la Justicia al ser requerido, y rechazó la justificación de la prisión, razonada por el juez de instrucción, con base en "relaciones residuales o influencias fundadas en los cargos públicos que ocupó en el pasado", y que podrían poner en peligro la investigación.
En el fallo de ayer, que exhimió de prisión a Boudou por el otro caso que le mantenía en prisión, los jueces explicaron que habían pasado "más de dos meses" desde el arresto y el magistrado que la ordenó, y que no decretó prisión preventiva, "no había definido las situaciones procesales de los detenidos".
Esto ponía de relieve, según el fallo, que el magistrado "o bien no contaba con los elementos que le permitieran cristalizar el vínculo de los imputados con los hechos que les había reprochado, o la urgencia entonces alegada no era tal".
El texto añadió que el proceso, que ha durado varios años, tuvo una "intempestiva variación" que culminó en las detenciones, pero "la actividad procesal hasta entonces desplegada" y que transcurrió, según el dictamen, a un ritmo "carente de dinamismo", tampoco se vio acompañada de una "correlativa actividad jurisdiccional que la respaldara".
Acerca de las supuestas facturas falsas, la defensa de Boudou consistió en aseverar que él no manejaba ese asunto y que lo delegaba en otros funcionarios.
"Él era ministro de Economía y en esa condición iba a reuniones del G20 y se reunía con ministros de todas partes del mundo, imagínese si iba a estar pendiente de si se pagaba esto o lo otro, o si se daban facturas", sostuvo su abogado.
Con respecto al expediente de blanqueo de dinero, el socio de Boudou, que ya quedó en libertad ayer, expresó ante medios locales su "preocupación" por haber estado "casi 70 días detenido sin estar procesado", y afirmó "no entender cómo un cambio de cheques en blanco con un banco parece lavado de dinero".