Medio centenar de muertos en una ataque suicida a una escuela de Kabul
Un insurgente suicida hizo detonar entonces los explosivos que portaba en su chaleco en el interior del Centro Educativo Mawoud, en el distrito policial número 18 y en el que estudiaban en ese momento centenares de alumnos.
Cerca de cincuenta personas murieron y varias decenas resultaron heridas en un atentado suicida perpetrado hoy en un centro educativo de Kabul y que se produce cuando el Gobierno afgano se plantea un alto el fuego con motivo de la festividad musulmana del Eid al Adha o "fiesta del sacrificio".
El barrio de Dasht-e-Barchi, principalmente chií, una minoría a menudo objetivo de la insurgencia, fue sacudido sobre las 16.00, hora local (11.30 GMT), por una fuerte explosión, indicó a Efe el portavoz de la Policía de Kabul, Hashmat Stanekzai.
Un insurgente suicida hizo detonar entonces los explosivos que portaba en su chaleco en el interior del Centro Educativo Mawoud, en el distrito policial número 18 y en el que estudiaban en ese momento centenares de alumnos.
"El atacante suicida hizo detonar sus explosivos, pegados a su cuerpo, dentro de una clase del Centro Educativo Mawoud", detalló el portavoz policial.
Se trata de un centro educativo privado en el que estudian principalmente menores, tanto niños como niñas, afirmó el jefe del Departamento de Investigación Criminal de la Policía de Kabul, Salem Almas, en su grupo oficial de Whatsapp.
Aparentemente, la detonación tuvo lugar en el último piso del inmueble, donde se preparaba a estudiantes de instituto para sus exámenes de acceso a la universidad.
El portavoz del ministerio afgano de Salud Pública, Wahidullah Majroh, confirmó a Efe que 48 cadáveres han ingresado en diversos hospitales, si bien se trata de cifras preliminares y todavía están "coordinando" los balances procedentes de varios centros.
Entre los fallecidos hay menores, pero no está claro cuántos.
Éstos son víctimas habituales de la guerra en Afganistán, donde sólo el año pasado 861 niños fallecieron y 2.318 resultaron heridos como consecuencia del conflicto, según datos de la Misión de Asistencia de Naciones Unidas en el país asiático (Unama).
Esta no es la primera vez que los insurgentes atacan un centro chií, con casos de atentados contra edificios culturales y religiosos, especialmente de la minoría étnica hazara, pero no es habitual que se atente contra escuelas privadas, la mayoría de las cuales no suele contar con guardas de seguridad.
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El presidente afgano, Ashraf Gani, afirmó que atacar este tipo de instituciones va en contra de las "enseñanzas islámicas" y ordenó a las autoridades que investiguen a fondo lo sucedido y proporcionen ayuda "inmediata" a las víctimas, según se indica en un comunicado del Palacio Presidencial.
También la Unama condenó enérgicamente la acción, al aseverar que estuvo dirigida contra la comunidad chií y que entre las víctimas hay muchas jóvenes.
"No hay ningún tipo de justificación para atacar civiles en ningún momento, bajo ninguna circunstancia", indicó la misión en su cuenta de Twitter.
El último ataque contra la comunidad chií tuvo lugar a principios de mes en la provincia de Paktia, en el este de Afganistán, donde 30 personas murieron y 81 resultaron heridas en un ataque suicida a una mezquita de la minoría chií hazara perpetrado por dos insurgentes disfrazados con burkas.
Los ataques contra esta comunidad suelen ser reivindicados por el grupo yihadista Estado Islámico (EI).
El pasado 22 de abril, un ataque suicida perpetrado por el EI contra un centro electoral en una zona de Kabul con gran población de la minoría chií hazara causó al menos 69 muertos y 120 heridos.
En el caso del ataque de hoy en Dasht-e-Barchi, los talibanes rechazaron estar detrás de la acción.
También Kabul ha sido objeto este año de un gran número de importantes ataques.
El último de envergadura tuvo lugar a finales de julio cerca del aeropuerto internacional de Kabul, minutos después de que abandonara la zona el convoy del vicepresidente afgano y antiguo señor de la guerra, Abdul Rashid Dostum.
La acción, reivindicada por el EI, causó 23 muertos y 107 heridos.