¡Anticipan triunfo en el 2024!
El ajedrez político en Panamá se removió ayer cuando 15 diputados del opositor Cambio Democrático encabezados por su secretaria general Yanibel Ábrego, se reunieron con Ricardo Martinelli para reconocer el liderazgo del exmandatario, anticipar un triunfo en las elecciones del 2024 y rechazar que la política se inmiscuya en la justicia.
El encuentro fue en la casa club de "El Loco", ubicada en Altos del Golf.
Martinelli, recién operado de la columna, levantó sus manos entrelazadas con las de Yanibel, quien dijo que busca generar consensos para volver a gobernar juntos agarrados de la mano, que es lo que la gente reclama en los recorridos que han hecho por el país.
"Yo les puedo asegurar una cosa. No es que sea un gurú, ni nada por el estilo, pero los que estamos aquí vamos a gobernar en el 2024, para mejorar la calidad de vida de los panameños y que no exista más persecución política", exclamó Martinelli.
Tanto Yanibel como Martinelli plantearon la necesidad de que el CD realice una convención extraordinaria para definir los liderazgos en ese partido.
Según Ábrego, fue un gran error permitir que Ricardo se fuera del CD: "Se debieron abrir espacios para su participación, pero lastimosamente por el egoísmo e individualismo de una persona, Martinelli se fue y logró su partido Realizando Metas".
"Ricardo es un gran líder y ninguno lo desconocemos. Queremos que la política de turno saque las manos de la justicia y se respete el debido proceso en la justicia panameña. Se ha hecho mucho daño. Tuvimos un presidente perverso (como Juan Carlos Varela) que se dedicó a perseguir y a acabar con todo lo que era CD", expresó Yanibel.
Martinelli manifestó que tiene un cariño especial por CD, porque fundarlo le costó alma, corazón, vida, exilio y cárcel, pero el partido no le pertenece a nadie, sino a los convencionales, que deben escoger libremente a sus nuevos dirigentes.
Sobre el proceso pinchazos, "El Loco" sostuvo que ya ganó ese juicio una vez y lo ganaría otras 10 veces ese proceso político, al que no debe ser sometido nadie nunca.