Bandas en Panamá aliadas con Clan del Golfo en tráfico de migrantes
Uno de los investigadores que rastrea este negocio criminal dijo a SEMANA que esta el Clan del Golfo controla todo en el Tapón del Darién y que sus principales aliadas son las redes sociales, por donde coordina y negocia el paso de las víctimas.
El Clan del Golfo está multiplicando su fortuna a costa del tráfico de personas entre Colombia y Panamá. No solo está transportando a migrantes que persiguen el sueño americano, también a supuestas células terroristas de alcance internacional, destaca un informe militar divulgado por la revista colombiana "Semana".
Una investigación de las Fuerzas Militares advierte que la organización delincuencial cobra peajes de hasta $300 por permitir el paso de ciudadanos por el Tapón del Darién. Además se revela que dos pandillas en Panamá colaboran con el negocio.
La misión del grupo es para que puedan circular venezolanos, cubanos, ecuatorianos, haitianos, africanos y asiáticos. Ese dinero debe ser entregado a la logística del viaje, encargada de amarrarles un cintillo que certifica la compra y darles una pegatina en sus pasaportes, un sello que les salva la vida en la trocha.
Los migrantes son clasificados en dos rutas que parten de Necoclí y Turbo, Antioquia: los que tienen más dinero adquieren un puesto en lanchas rápidas para llegar en cuatro horas a Panamá y los demás se van por la ruta tradicional, un recorrido a pie de once kilómetros que puede tardar cinco días, dependiendo del clima y la capacidad física del sujeto.
De enero a mayo llegaron a Darién 167,640 migrantes y el año pasado fueron 520,085 migrantes que atravesaron la peligrosa selva entre Colombia y Panamá, que equivaldrían a un peaje total de $156 millones, aunque hace poco el ministro de Seguridad de Panamá, Juan Manuel Pino alegó que las organizaciones criminales que movilizan a los migrantes por Darién, ganaron $820 millones en el 2023.
Uno de los investigadores que rastrea este negocio criminal dijo a SEMANA que esta el Clan del Golfo controla todo en el Tapón del Darién y que sus principales aliadas son las redes sociales, por donde coordina y negocia el paso de las víctimas.
“A estas personas les son puestas unas manillas de colores en sus muñecas para ser identificadas. Las personas que no tienen esas manillas son retenidas en un campamento improvisado hasta por tres días, mientras sus familias hacen consignaciones o transferencias a través de medios electrónicos”, afirmó el funcionario en anonimato.
Alianza internacional
La investigación de las Fuerzas Militares también expone una presunta alianza criminal entre carteles internacionales por la migración irregular. Las pruebas muestran que el Clan del Golfo tendría el objetivo de mover a los extranjeros hasta Panamá y ofrecería planes especiales para transportar cocaína y armamento por el Darién.
Los socios en Ecuador serían Los Choneros y Los Lobos, dos de las bandas más peligrosas de ese país. Sus integrantes entregarían a los migrantes al Clan en el suroccidente colombiano, para que sean transportados hasta el Urabá y luego a la selva.
Lo mismo ocurriría en Venezuela con el Tren de Aragua. Esta asociación sería la más millonaria de todas, pues los venezolanos son los que más se mueven por esta frontera.
Una vez los migrantes pasan a Centroamérica, el grupo delincuencial de Otoniel cedería a las personas a las pandillas de Bagdad y Calor Calor de Panamá.
Posteriormente, para llegar a Norteamérica, son complementados con las labores de las organizaciones mexicanas, tanto el Cartel de Sinaloa como el Cartel de Jalisco Nueva Generación.
Hace poco el Departamento de Estado de Estados Unidos ofreció una recompensa de hasta $8 millones a cambio de información que posibilite las detenciones y/o condenas u obstrucciones financieras contra los líderes del Clan del Golfo involucrados en el contrabando de personas.