Caen 110 miembros de estructuras criminales y todos son procesados
El ministro detalla que en el año 2020 producto de la pandemia y por la naturaleza de este tipo de delito, solo se llevaron a cabo cinco operaciones antipandillas, lo que arrojó como resultado la judicialización de 74 ciudadanos, con 135 sentencias condenatorias, 24 de ellas mediante acuerdos de pena.
El ministro de Seguridad, Juan Manuel Pino, indicó que a través de las Operaciones “Jérico y Cismo” (Colón), “Neptuno” (Panamá Centro y Panamá Oeste), “Fénix”(San Miguelito) y “Aquiles” (región metropolitana), se lograron acertar duros golpes sobre los cabecillas de estas estructuras criminales, en las que fueron judicializados 110 ciudadanos, 69 por el delito de pandillerismo y 41 por el delito de crimen organizado.
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Pino informó que la proliferación de las pandillas, el narcotráfico y el delito de crimen organizado, constituyen una amenaza a la seguridad pública, obstaculizadon el desarrollo social y económico de un país, al tiempo que actúan como detonantes de violencia, por causa de los constantes enfrentamientos entre grupos rivales, dejando como saldo: muerte y desolación.
El ministro detalla que en el año 2020 producto de la pandemia y por la naturaleza de este tipo de delito, solo se llevaron a cabo cinco operaciones antipandillas, lo que arrojó como resultado la judicialización de 74 ciudadanos, con 135 sentencias condenatorias, 24 de ellas mediante acuerdos de pena.
Todos estos delitos que tiene sentencias que alcanzan hasta los 15 años de prisión, sin perjuicio de los otros delitos en el que incurran y que se les sean comprobados.
Pino señala que el perfil de los integrantes de estas estructuras criminales, que operan al margen de la ley, se caracterizan principalmente por crecer en hogares disfuncionales, consumo de drogas a temprana edad, deserción escolar y sentido de pertenencia.
“Entre los riesgos de pertenecer a estas organizaciones dedicadas al crimen, está la cárcel, la muerte y peor aún, las amenazas en contra de sus propios familiares”, indicó.
Destaca que lamentablemente estos fenómenos que emanan de la criminalidad, están arraigados culturalmente en muchas familias, quienes en muchos casos tratan de encubrir y protegen al infractor, convirtiéndose en un estilo de vida y como un medio de subsistencia.
Además de dar a conocer estos detalles de cada operación realizada, resalta que en el primer trimestre del presente año, las unidades operativas del Departamento contra el Crimen Organizado y la Sección de Antipandillas, de la Dirección de Investigación Judicial de la Policía Nacional, en coordinación con el Ministerio Público, han redoblado esfuerzos en la lucha contra estos flagelos, en regiones como Panamá, Panamá Oeste y Colón.