Colegio Médico condena fallo por muerte de neonatos
El Colegio Médico de Panamá (CMP) y la Asociación Médica Nacional (AMN) expresaron su preocupación ante la reciente condena del Dr. Iván Sierra Robles, reconocido neonatólogo, por su presunta responsabilidad en la muerte de varios neonatos en 2013, quienes fallecieron tras ser expuestos a heparina sódica contaminada con alcohol bencílico en el Complejo Metropolitano de la Caja de Seguro Social (CSS).
Los gremios comparten el dolor de las familias afectadas con la tragedia, pero reclaman un juicio justo, donde se pondere debidamente las responsabilidades e instan a las autoridades y a la comunidad a reflexionar sobre este caso.
Un golpe para el gremio
El Colegio Médico calificó a Sierra como un médico "destacado y admirado" que ha entregado su vida al cuidado de los recién nacidos más vulnerables. Según ellos, la condena de cinco años de prisión impuesta por la Corte Suprema no solo afecta la vida personal y profesional del neonatólogo, sino que también envía un mensaje de temor a otros médicos que asumen puestos de jefatura en servicios hospitalarios.
La condena implica que los médicos en posiciones de liderazgo corren el riesgo de perder su libertad y su idoneidad por situaciones que a menudo escapan de su control directo", señalaron en su pronunciamiento. Para ellos, la responsabilidad en unidades de cuidados intensivos es extremadamente compleja, con múltiples factores de riesgo que dificultan la detección temprana de anomalías.
Justicia balanceada
El CMP y la AMN subrayaron que, aunque reconocen y comparten el dolor de las familias afectadas por la tragedia, es fundamental que las decisiones judiciales se tomen con un análisis profundo y justo de las responsabilidades de todos los actores involucrados. "No puede permitirse que profesionales dedicados sean injustamente castigados por errores sistémicos o fallas no intencionadas en el proceso de atención", puntualizaron.
Temor al futuro del ejercicio médico
La comunidad médica teme que este fallo judicial marque un precedente inquietante para otros médicos que se enfrenten a decisiones difíciles en sus puestos. Las organizaciones instan a las autoridades judiciales y a la sociedad a reflexionar sobre las consecuencias de esta condena. Además, hacen un llamado a mejorar las condiciones en los centros de salud públicos, pidiendo la acreditación de las instituciones y recursos suficientes para garantizar la calidad y seguridad en la atención.
El caso de los neonatos fallecidos en 2013 ha revivido dolorosas heridas en el país, y con este fallo, la comunidad médica advierte sobre los peligros de un sistema que parece penalizar sin tener en cuenta las realidades de la práctica médica.