Desclasificaciones / Caso Gallego
Un buen día recibo la visita en la cárcel El Renacer de un compañero del colegio La Salle con un mensaje de Monseñor. José Dimas Cedeño en ese momento arzobispo de Panamá. Como soy católico apostólico romano y practicante, se me pidió la cooperación sin ninguna condición ni beneficio personal, hablara y de que convenciera al Tte. Crol. Nival Madriñán Aponte para que se reuniera con monseñor Cedeño.
El tema es el caso del padre Gallego. Ya habían sido condenados M. Walker y Madriñan. Acepté apoyar el esfuerzo de la iglesia católica panameña, sin asegurar que Madriñán aceptara la reunión.
El mensajero me informa que esta gestión tenía la autorización del gobierno y organizaron el encuentro fuera de la cárcel de El Renacer.
Hable con "Ñan" como lo conocíamos, logre convencerlo que se reúna con el monseñor Cedeño en secreto y sin condiciones.
Le avisé a mi contacto y éste me dio las instrucciones de la operación. Un carro nos sacó de El Renacer diciendo que íbamos a una gestión en el Ministerio Público, nadie conocía el real destino y la misión. Se mantuvo en secreto hasta esta desclasificación.
La reunión fue en la iglesia de Gamboa frente al altar. Cara a cara Madriñán y Monseñor. Yo fui el testigo presente. No hubo grabaciones. El único tema: el caso Gallego.
Lo que escuché: Madriñán le dijo:
1.- El Cura Gallego no era un interés o amenaza, o blanco de inteligencia para la Guardia Nacional.
2.- Los terratenientes de Santa Fe de Veraguas se quejaron con el General Torrijos a través de Gerardo González Vernaza, que el cura estaba organizando al pueblo y lo estaba adoctrinando con ideas comunistas. Y que lo sacaran. Era un conflicto de tierras.
3.- Héctor Gallego se tuvo conocimiento después, que fue un admirador del cura colombiano guerrillero Camilo Torres. Miembro combatiente de la guerrilla del ELN.
4.- Monseñor Marcos Gregorio McGrath, tenía conocimiento previo del malestar de un sector de habitantes de Santa Fe. Le habían solicitado que lo sacara de la parroquia.
5.- A solicitud de los terratenientes de Santa Fe se ordenó hacer una investigación de inteligencia militar, no seguimiento, para verificar las quejas de la comunidad.
Ya Gallegos había hablado una vez con el Gral. Torrijos.
Unidades de soldados de los Macho de Montes (compartimentado al G-2) los comisionan que suban a Santa Fe y traigan al padre Gallego a Panamá.
Fue una orden mal dada, o incompleta, la intención era buscarlo para una reunión, no detenerlo. Se quería hablar con el padre Gallego.
Querían hablar con el padre Gallego. El error de estos soldados que no eran policías, fue llegar de noche e hicieron una captura aplicando fuerza innecesaria. Golpearon fuertemente en la cabeza a Gallego con la cacha de una pistola cal 45, y lo metieron en un jeep. En aquella época la carretera estaba muy mala condiciones y se afecta más su herida, lo conducen a Divisa y lo meten en la escuela de Artes Mecánicas. Es ahí horas después que se dan cuenta que el sacerdote está gravemente golpeado, y que se había cometido un grave error y mal procedimiento.
Refiere Madriñán a Monseñor Cedeño que él no tuvo acceso en ese momento; y ve al padre Gallego grave en Panamá en una casa de Seguridad, que se le conocía como La Charca.
Por oídas se enteró que fallece en la “La Charca “; y ordenan desaparecer su cuerpo por medio de un helicóptero y es lanzado al mar.
Desconoce quién tenía la orden de disponer del cuerpo.
En la reunión quedó claro la inocencia de Madriñan y Walker acusados de la muerte y desaparición del cura Gallego. Y también quedó claro que el cuerpo fue lanzado al mar.
Ni Madriñán ni Walker capturaron o golpearon a Gallego. Pero fueron condenados a 15 años que cumplieron la pena impuesta.
A los que capturaron al padre Gallego nunca se le investigó y menos llamados a juicio, y tampoco a los terratenientes que si tenían interés en sacarlo de Santa Fe.
Fue una investigación mal llevada por los fiscales ….