ETESA se negó a certificar si los reactores de CELMEC aún funcionan
La Empresa de Transmisión Eléctrica, S.A. (ETESA) se negó a certificar si los reactores que compró a la empresa CELMEC aún se encuentran funcionando en la Subestación de Mata de Nance (Chiriquí), o están dañados como se señaló en una denuncia que recibieron la Contraloría, Autoridad Nacional de Transparencia y Acceso a la Información (ANTAI) y la Procuraduría General de la Administración. La compra alcanzó los $1.5 millones.
Se consultó a ETESA si los reactores e interruptores de potencia para la Subestación de Mata de Nance (Chiriquí) concretada en julio de 2017 aún están operativos o fuera de servicio por daños, pero la institución prefirió referirse a un comunicado donde solo dijo que cooperará con las diligencias que las autoridades competentes estimen realizar tras la denuncia presentada ante la Contraloría y la ANTAI, por posible lesión patrimonial en la compra.
ETESA tampoco quiso explicar cómo una compra de equipos como reactores, considerados de larga vida, solo tenía un año de garantía.
“Esta licitación culminó el 26 de julio de 2017, contando con la garantía establecida por la ley, vigente la misma hasta el 18 de octubre de 2018. Durante este período según nuestros archivos, no existieron reportes que señalaran deficiencias en dichos equipos”, dijo ETESA en su comunicado sin responder si los equipos señalados aún están en funcionamiento.
El 13 de enero, Contraloría, ANTAI y la Procuraduría de la Administración recibieron la denuncia ciudadana sobre la posible lesión patrimonial en la compra de los reactores a CELMEC, pero además se reportó un pago por intereses y pólizas de $5 millones en los últimos meses de la administración de Juan Carlos Varela.
ETESA tampoco pudo responder a este medio con exactitud sobre si este pago ordenado por un juzgado civil, debió pasar por un proceso en la Sala Tercera de la Corte donde se deslindan los reclamos contra el Estado. ETESA tampoco pudo explicar si el pago a CELMEC de este reclamo pasó por todo el proceso administrativo que conlleva antes que la Contraloría, en ese momento a cargo de Federico Humbert, lo refrendara. Es decir, MEF y traslados de partidas en la Asamblea.
ETESA solo dijo que la empresa CELMEC, S.A. presentó una demanda de mayor cuantía en contra de ETESA el 20 de septiembre de 2016 pidiendo el pago de US$27,884,282.90 en virtud de daños y perjuicios en concepto de saldos pendientes de pago del precio de 3 contratos, más sobrecostos financieros por la prolongación de la ejecución de los mismos, costos directos e indirectos, extensión de fianzas de seguros e intereses notorios.
Explicó que haciendo uso de los medios excepcionales de terminación anticipada de los procesos, las partes acordaron finalizar este litigio mediante una transacción ante el Tribunal de la causa (Juzgado 17° del circuito ramo Civil del 1er Circuito Judicial de Panamá), poniendo fin a la instancia y declarando ambas partes no tener reclamaciones al respecto, por 5.2 millones de dólares.
La denuncia que ahora las autoridades tienen, pide que se abra una investigación para determinar si hay lesión.
“Solicitamos a su institución que debe velar por los intereses del Estado, dentro de la estatal ETESA, abrir una investigación oficial sobre este caso que vincula a la empresa CELMEC y sus responsables, debido a los reportes fidedignos de que los reactores que se entregaron sufren desperfectos, afectando la operación del proyecto Mata de Nance Progreso”, reclama la denuncia.
Sobre el pago de $5.2 millones en reclamo de intereses y pólizas a favor de CELMEC, la denuncia afirma que no es común que un contratista haya entablado un proceso judicial reclamando intereses por pagos atrasados, costos directos e indirectos y costos por exenciones de fianzas y pólizas. Sobre todo en una relación se confianza que se había dado en el gobierno de Varela entre la empresa y ETESA.
“CELMEC S.A. logró que en un proceso que tomaría muchos años, ETESA y la Contraloría en la gestión de Federico Humbert, le pagara el 24 de abril de 2019 los $5.2 millones, sin ningún tipo de oposición a la primera instancia judicial, el juzgado décimo séptimo de circuito de lo civil”, detalla la denuncia.