Nacional - 29/2/20 - 12:00 AM

Fiscalía inicia investigación para identificar a Grifina

 

Por: Yorlenne Morales y Jorge Luis Barría / Crítica Impreso -

La Fiscalía Metropolitana de Panamá inició una investigación de oficio para determinar la identidad de Grifina López, quien presuntamente se creía que era Mónica Milagros Serrano García, desaparecida hace 17 años.

La investigación se inicia en base en el artículo 205 del Código Penal, sobre los delitos contra la identidad y tráfico de personas menores de edad que establece que "quien suprima o altere la identidad de un menor de edad en los registros del estado civil, será sancionado con prisión de tres a cinco años. La misma pena se aplicará a quien, a sabiendas, entregue un menor de edad a una persona que no sea su progenitor o a quien no esté autorizado para recibirlo".

Ayer corrió como pólvora que una prueba inicial de ADN practicada a Grifina y comparada con una de Delcidia García, tía de Mónica Serrano, había resultado positiva, pero horas después -tras una reunión en el laboratorio Genetix del abogado indígena Héctor Huertas y Osvaldo "Papelón" García, tío abuelo de la desaparacida- las esperanzas se disiparon un tanto.

La llegada de Grifina a la comunidad guna de Wargandí no está clara. El abogado Huertas dijo que vivió dos años en Tocumen, pero la familia guna afirma que residió sus dos primeros años en Veracruz, luego fue a isla Perro y después llegó a Wargandi.

La supuesta madre de la joven guna la dio a luz a los 40 años. Al igual que su hija se llamaba Grifina López y su esposo Afrodicio Oller Grimaldo. En un principio se alegó que el padre de la chica era colombiano.

Grifina López dijo ayer a Telemetro que está dispuesta a realizarse otra prueba de ADN, para estar completamente segura si ella es o no Mónica Serrano, luego de que la prueba comparada con la Delcidia García arrojó un resultado no concluyente.

Grifina López, quien alega tener una edad de 17 años, está casada con el hijo del saila y tiene una bebé de 12 meses.

Inicialmente se filtró que la prueba de ADN había dado un resultado de 25% de compatibilidad con la tía de la niña, sin embargo, a su salida del laboratorio ni el tío, ni el abogado hicieron comentarios sobre los resultados y más bien indicaron que debían gestionarse a través del Ministerio Público.

"Estos porcentajes no marcan para hacer una afirmación científica y legal. Las partes nos pusimos de acuerdo en que esto se mantenga en reserva, lo único que puedo decirles es que vamos a esperar otra muestra para hacer una confirmación", manifestó el abogado.

Huertas dijo que sostendrán una reunión la próxima semana con el Procurador Eduardo Ulloa. “Hay grandes probabilidades de que no se trate de Mónica Serrano”, afirmó el abogado.

Una persona tiene en total de 46 cromosomas, agrupados en parejas de 2, por lo tanto tenemos 23 parejas, de cada pareja uno de los cromosomas lo recibimos de nuestro padre biológico y el otro de nuestra madre biológica. Los varones tienen un cromosoma X y un cromosoma Y; las mujeres tienen dos cromosomas X.

Mónica Serrano desapareció cuando tenía 18 meses. Se llevaron de la casa de su abuela en Loma Bonita, en Vista Alegre de Arraiján, ya que sus padres: Castor Dominador Serrano y Mónica García, residían en el área de Carrasquilla.

La desaparecida Mónica debería cumplir 19 años el 13 de julio. La desaparación fue el 8 de febrero de 2003.

Grifina y Mónica tienen características muy similares: tez blanca, cabello rojizo ensortijado y cicatriz en el rostro.

En tanto, un silencio reinaba ayer en la comunidad de Wagandi, solo se observaba a unos niños correr por la calle de tierra, jugando entre el polvo que levantaba el viento.

Wargandi es una comunidad, que queda a unas dos horas de la ciudad capital, con al menos 47 casas y un aproximado de 300 personas entre adultos y niños, liderada por un Saila, quien desde el congreso habló unas cuantas palabras con Crítica.

"Esperamos que todo se esclarezca" indicó el Saila, quien desde adentro del rancho donde está el congreso de la comunidad, explicaba que la niña llegó de Guna Yala cuando tenía entre los 4 ó 5 años, con sus papás, pero que ellos como autoridad no pueden indicar con exactitud qué pasó con ella.

"Los papás llegan con los niños aquí, pero nosotros no le hacemos registro alguno", resaltó el Saila, quien era ayudado para responder por dos mujeres que estaban a su lado, con las manos llenas de harinas porque hacían pan.

Aunque Grifina no se encontraba en la comunidad, por estar realizando unos trámites de su hijo en Chepo, un hermano de ella caminaba por la calle y al ser abordado sobre el tema, solo se limitó a decir que no sabía nada sobre el caso y un poco molesto se retiró con dirección a su casa en busca de una bomba para inflar llantas.

Las personas adultas se limitaban a salir de sus casas, por motivos desconocidos, que daban a entender que no querían hablar sobre el tema, los únicos que salían de las casas, eran los niños, quienes con una sonrisa de orejas a orejas, saludaban muy contentos.

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