Fósiles marinos revelan historia sobre el pasado profundo de Panamá
Recientes descubrimientos de fósiles en el área norte del Canal de Panamá sugieren que un intercambio de especies marinas persistió por medio de canales que conectaban los océanos Atlántico y Pacífico, y que eran poco profundos durante las etapas finales de formación del istmo.
En 2017 y 2019, Aldo Benites-Palomino estudiaba fósiles colectados en el Caribe panameño, cuando se topó con unos especímenes inesperados.
Los fósiles pertenecían al Mioceno tardío, hace entre 6.4 y 5.8 millones de años, cuando ya habían comenzado las etapas finales de formación del istmo. Este acontecimiento impactó en las aguas oceánicas y las corrientes marinas de todo el planeta y desencadenó eventos de especiación, en los que especies separadas por el puente terrestre desarrollaron sus propias características únicas en uno y otro océano.
Sin embargo, estos cetáceos hallados en el Caribe panameño comparten similitudes con otras especies del Mioceno tardío procedentes del Océano Pacífico Norte y Sur, en particular de la Formación Pisco en Perú, lo que sugiere que algunos organismos aún eran capaces de dispersarse a través del canal marino poco profundo en un momento en el que ya no se producía el intercambio de aguas profundas entre ambos océanos.
La escasez de mamíferos marinos fósiles del Caribe occidental ha dificultado hasta ahora la comprensión del pasado profundo de la región, por lo que estos nuevos hallazgos ayudan a reforzar los conocimientos actuales sobre la conectividad entre las faunas marinas del Pacífico y del Caribe durante las fases finales de formación del istmo.
“El registro fósil de vertebrados marinos de Panamá ha sido poco explorado”, dijo Carlos Jaramillo, científico del STRI y coautor del estudio. “Todavía hay muchos especímenes que necesitan ser estudiados y muchos más aún en las rocas esperando a ser encontrados”.