Francolini, el testigo protegido en New Business
Riccardo Francolini trata de desvincularse de la arquitectura financiera del caso New Business, convirtiéndose en el testigo protegido de la Fiscalía Primera Especializada Contra la Delincuencia Organizada y en sus declaraciones mete en el baile al excanciller del actual gobierno Alejandro Ferrer.
Fuentes del Ministerio Público señalaron que el testigo protegido de la fiscalía denominado FECDO-10-2020, es Riccardo Francolini, quien en una ampliación de su declaración indagatoria el 22 de octubre de 2020 señaló a Alejandro Ferrer –ex canciller del gobierno de Nito Cortizo- como la persona que “planteó” la venta de los periódicos del Grupo Epasa, en aquel momento bajo el mando de Francisco Arias.
Tengo conocimiento que Alejandro Ferrer, amigo de Henri Mizrachi, está casado con una señora de apellido Arias, que eran los dueños anteriores de Grupo Epasa, fue quien planteó la venta de este medio de comunicación. Henri Mizrachi, junto con el abuelo de su esposa, el señor Moisés Levy, trataron y no lograron armar un grupo de inversionistas de la comunidad hebrea para la compra del grupo Epasa. En esa misma época tengo conocimiento que Ricardo Martinelli se enteró del referido interés de venta de la familia Arias y para ello se contactó con Henri Mizrachi con quien mantuvo varias reuniones en la Presidencia de la República, para tratar todo los relacionado con la compra de este medio de comunicación”, declaró Francolini bajo el manto del anonimato o como testigo protegido de la fiscalía a cambio de conseguir su exclusión del proceso judicial, al igual que Henri Mizrachi. En la vista fiscal, ninguno de los dos fue imputado.
Francolini dijo que tenía conocimiento que Martinelli en su momento contactó a amigos y varios allegados comerciantes para que aportara e invirtieran en la compra de Editora Panamá América.
“En ese sentido me tocó presenciar cuando Ricardo Martinelli contactó a diversos contratistas del Estado panameño (Transcaribe Trading, Excavaciones del Istmo y Grupo CLIO) a quienes les pidió aportes para poder concluir la compra de este medio de comunicación, muchos de ellos accedieron y coordinaron con él los aportes que se utilizarían para dicha compra”, señaló el testigo protegido de la fiscalía.
En contradicción con su declaración, el mismo Mizrachi informó a la fiscalía que el organizador de la compra y quien buscó el dinero entre empresarios junto con él fue el mismo Francolini, quien además era en ese momento era presidente de la Junta Directiva de Caja de Ahorros.
Al final, los que coordinaron e hicieron la compra, se convirtieron en testigos protegidos y fueron excluidos de la vista fiscal.