Hay $69 millones para reparar escuelas y no se utilizan
El presidente Laurentino Cortizo recordó a los directores de los planteles educativos que cuentan con recursos del Fondo de Equidad y Calidad de la Educación (FECE) para utilizar en el mantenimiento de las escuelas.
Durante su participación en el acto cívico de la Escuela La Concepción, en Juan Díaz, el mandatario señaló que estos recursos del FECE pueden ser utilizados en la compra de equipos de laboratorio, mobiliario escolar, tecnología educativa, materiales didácticos, así como también en la reparación y mantenimiento de centros educativos y para fortalecer programas nutricionales.
El jefe del Ejecutivo indicó que al 28 febrero de este año, contaban con $69.1 millones sin ejecutar de este fondo, disponibles para reparaciones y mantenimiento, y se agregan $18,100,000 del último trimestre del año pasado.
727 días sin clases presenciales
Cortizo, el vicepresidente Gabriel Carrizo, ministros y gobernadores acompañaron ayer a los estudiantes en el inicio del año escolar 2022, después de dos años de pandemia.
Tras dos años de modalidad virtual y semipresencial debido a la pandemia, ayer 954.233 estudiantes iniciaron las clases presenciales en Panamá, las cuales habían sido suspendidas el 10 de marzo del 2020, hace 727 días.
El gobernante acompañado de la ministra de Educación, Maruja Gorday de Villalobos, participó de los actos protocolares en la Escuela La Concepción, en Juan Díaz. Posteriormente, se trasladó a la Escuela Ernesto T. Lefevre, donde realizó un recorrido.
El jefe del Ejecutivo indicó que este es un día de gran significado para nuestros estudiantes, docentes, padres de familia, familiares y para el país, luego de las terribles dificultades sufridas a causa de la pandemia Covid-19.
17% de escuelas no están operativas
“Hoy 7 de marzo, después de 24 meses, estamos retornando a las clases presenciales. De 3,102 escuelas oficiales en el país, al 4 de marzo tenemos 2,573 centros operativos; es decir 82.95%; al 11 de marzo tendremos 2,623 centros operativos, 84.56%; y al 18 de marzo, serán 2,668 centros, con un 86.01%, y seguimos trabajando”, dijo el mandatario.
Laurentino Cortizo resaltó además la importancia que tienen los educadores en la formación de los estudiantes y los invitó a no hacer énfasis en un aprendizaje de memoria, sino a enseñarles a los estudiantes a pensar, a trabajar en equipo, a resolver problemas, “ese es el triángulo del éxito”, remarcó.
Por su parte, el vicepresidente de la República y ministro de la Presidencia, José Gabriel Carrizo, asistió al inicio de clases en el Centro Educativo Bilingüe República de Francia, en Cerro Batea; y en la Escuela Pedro J. Ameglio, en San Antonio.
La modalidad de clases virtual registró barreras, como la falta de conectividad en muchas áreas o que los alumnos más vulnerables carecieran de equipos.
Enseñanza virtual no logró compensar
El oficial de Educación de Unicef en Panamá, Francisco Trejos reconoció que la educación a distancia “no logró compensar todo el aprendizaje que se puede lograr a través de la educación presencial”.
“Tenemos el compromiso de reforzar esos conocimientos que se perdieron (durante la pandemia) porque no es lo mismo estar presencial que virtual y nos va a costar años, ya que el impacto fue grande”, declaró a Efe la profesora Yeneyra Domínguez.
Trejos recordó que alrededor del “90 % de los estudiantes que han recibido educación a distancia tiene aprendizajes empobrecidos”, según un estudio del Banco Mundial (BM).
En tanto, el ministro de Desarrollo Agropecuario, Augusto Valderrama, participó del acto de inicio de clases del Instituto Técnico Superior de Agro Tecnologías de las Américas (ITSAA-INA), ubicado en Divisa, con una matrícula de 189 estudiantes.
Valderrama, en su intervención, señaló que ante la Patria y ante la Bandera hemos jurado que seguiremos trabajando por la paz, la construcción del país, y por el sector agropecuario, que ha demostrado que la seguridad agroalimentaria y la soberanía alimentaria juegan un papel fundamental ante esta crisis, porque los pueblos que no puedan fabricar sus alimentos y producir lo básico, están condenados a desaparecer.