Hito jurídico, nefastos planes del gobierno para tomarse Epasa
El abogado advirtió que la situación pone en vilo a más de 100 trabajadores de Epasa. También lamentó el silencio de otros medios ante el peligro que sufre la libertad de expresión.
El abogado Gilberto Cruz, representante legal de Editora Panamá América (Epasa), expresó su preocupación por la situación de estos medios de comunicación, los cuales pretende tomar el gobierno tras la sentencia del caso New Business.
Según Cruz se trata de un hito jurídico nefasto, para Panamá y América Latina, en materia de prensa y de cercenar esos derechos de libertad de expresión bajo pretextos de querer unir la relación comercial de un grupo de accionistas con la línea editorial. Además recalcó que la empresa no fue parte del proceso.
"Existe un irreparable irrespeto al debido proceso y eso vende una inseguridad jurídica para la inversión extranjera. Entonces definitivamente es importante hacer un estudio profundo del caso", expuso.
En este sentido, Cruz recordó que la magistrada María Eugenia López insistió en fallar un amparo de garantías, pese a que previamente se presentó una solicitud de desistimiento.
De acuerdo con Cruz, Epasa presentó un amparo, pero cuando la defensa supo que había sido adjudicado a López, tomó la decisión de desistir porque sabía cuál era su línea.
"No fue hasta un mes después que la ponente, pese a haber ya desistido de la solicitud, lo falla inadmitiéndolo. Esto es una muestra de que el sistema de justicia está torcido y alineado a personas no identificadas en el caso", expuso.
El abogado advirtió que la situación pone en vilo a más de 100 trabajadores de Epasa. También lamentó el silencio de otros medios ante el peligro que sufre la libertad de expresión.
"Los únicos afectados de esta lucha estéril son los colaboradores. Esto pone en vilo la fuente de empleo para al menos 100 trabajadores", añadió.
El miércoles, colaboradores de Epasa se manifestaron de manera pacífica en las inmediaciones de la empresa. De igual forma firmaron una carta que luego enviarán a Roberto Rock, presidente de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP).