La crisis de la basura se agudiza en la ciudad de Panamá
Las pilas de basura se acumulan en casi todos los rincones de la Ciudad de Panamá, un problema de largo arrastre que se agudizó en los últimos meses por la escasez de camiones compactadores, y una reciente huelga de las “hormiguitas“, el personal que recoge y limpia las calles, lo que vino a agravar la crisis.
“¿Qué impresión se van a llevar los turistas sobre esto? ¡Mire la suciedad! ¿Qué van a decir, que en Panamá somos todos cochinos?”, dijo a Efe José Madrid, quien habita en el populoso barrio de Calidonia, en pleno centro de la ciudad cerca a la sede del Parlamento panameño.
La huelga de los recogedores de la basura, que finalizó este miércoles tras casi una semana, en demanda de mejores salarios y condiciones de trabajo, puso otra vez el foco sobre un problema añejo, al parecer insuperable, para la Ciudad de Panamá: la generación, el acopio, la gestión y disposición de los desechos.
“Llegamos a algunos acuerdos, dando respuesta a los trabajadores (de Aseo), se convino en levantar el paro para el día de hoy miércoles para evitar un problema de salud pública, (para) embellecer la ciudad“, declaró este miércoles el ministro de Salud, Luis Francisco Sucre a la televisión local.
UN PROBLEMA DE SALUD PÚBLICA
Para algunas personas y representantes de los huelguistas, se está ante un asunto que plantea retos y desafíos en materia de salubridad, en buena parte porque la basura prácticamente “inunda” las principales vías y calles de la capital y su periferia, atrayendo malos olores y la presencia de alimañas y moscas.
Madrid aseguró a Efe que dada la prolongada y creciente acumulación de basura los niños se están enfermando y las puertas de las casas deben permanecer cerradas por las moscas, que “se pegan a la ropa” y la comida.
“Aquí mismo, a unos cuantos metros hay una parada (de autobuses) y no se puede estar porque está llena de moscas. Aquí nos va a dar una epidemia. ¿A quién tenemos que llamar, a la Organización Mundial de la Salud? Porque parece que aquí no hay autoridades responsables“, lamentó Madrid.
El Ministerio de Salud desmintió días atrás que el creciente número de casos de diarrea que se están dando en la capital estén relacionados a la crisis de la basura: se trata de casos de origen viral, no bacteriano, explicó el titular de la cartera.
Elvis Bonilla, otro vecino de Calidonia, que tiene 56 años viviendo allí, atribuye a la corrupción el abandono en que se encuentra el corregimiento de Calidonia sin atender el problema de la basura, ya que “cada uno (las autoridades responsables) le tira la bola al otro y ninguno hace nada.}
“Sube Gobierno, baja Gobierno y quedamos en lo mismo“, se lamenta este panameño.
Un estudio sobre los avances del “Programa Basura Cero 2015-2035” del Municipio capitalino, que cuenta con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), señala que Panamá está entre los países de Centroamérica “con uno de los mayores índices de generación de basura per cápita.”
Es así que en promedio cada ciudadano está generando entre 1,0 a 1,2 kg por día, con un aproximado de 2.500 toneladas de basura que ingresa diariamente al vertedero a cielo abierto de Cerro Patacón y unas 300 toneladas diarias que quedan en las calles y quebradas sin recogerse.
La AAUD apunta por su parte al deterioro de su flota vehicular, con solamente 30 camiones recolectores y compactadores que están operativos, mientras los contratos de alquiler de retroexcavadoras y camiones volquete que se utilizan también para recoger los desechos ya expiraron, alegando que todo radica en una falta de presupuesto.