La “ola” más grave es de desempleo
Ante el reciente aumento en el número de contagios, algunos especialistas han advertido sobre una posible quinta ola de la pandemia. Pero la “ola” más perversa y devastadora que hoy enfrenta Panamá no es de COVID-19, sino de desempleo. Y se está agravando.
La reactivación económica que experimenta el país es impulsada por su sector externo, concretamente, las exportaciones de cobre de Minera Panamá, mayores ingresos del Canal y actividad de la Zona Libre de Colón. Pero la demanda interna sigue deprimida, con tres sectores particularmente rezagados: construcción, comercio al detal y turismo, que concentran un tercio de la fuerza laboral del país. Panamá experimenta crecimiento económico y crisis laboral, a la vez.
La 4ta. mayor contracción económica del mundo
Continuamos en el proceso de recuperación de la peor catástrofe económica y laboral de la historia, que incluyó la cuarta mayor contracción económica en el mundo (2020) y la pérdida de 364 mil trabajadores asalariados (42% del total) del sector privado. En el primer año de pandemia, 3 de cada 4 trabajadores asalariados de la empresa privada perdieron sus trabajos o sufrieron la suspensión de sus contratos laborales. 15% de los trabajadores suspendidos no recuperaron sus empleos.
Desaparecieron 250 mil empleos formales
En el 2021 se recuperó una fracción de los empleos perdidos el año anterior. Entre el 2019 y 2021 desaparecieron unos 250 mil empleos formales del sector privado, incluyendo a los 43,082 trabajadores cuyos contratos fueron reactivados y luego desvinculados, al tiempo que se agregaron 71 mil servidores públicos a la planilla estatal, que hoy ronda los 365 mil funcionarios (INEC, junio 2021). Y en abril 2022, más de 400 mil personas recibieron el Vale Digital, porque no encuentran trabajo.
Menos empleos formales que hace 15 años
Restando la planilla estatal de los 1,031,328 asalariados existentes en el país (INEC, octubre 2021), el número de empleos formales del sector privado es de unos 666 mil, cifra inferior a los 675,635 que había en el 2007 (INEC). Más aún, de este número deben restarse las más de 43 mil desvinculaciones.
Casi un millón reciben platita del Estado
Sumando los 400 mil beneficiarios del Vale Digital, 365 mil funcionarios públicos y 191 mil personas que reciben subsidios del MIDES mensualmente, tenemos que casi un millón de panameños reciben dinero del Estados todos los meses, financiados principalmente a través de préstamos. Esto es insostenible.
La crisis laboral que enfrenta el país no es de “empleo”, sino de confianza. Los 400 mil beneficiarios del Vale Digital (abril 2022) es prueba de la crisis laboral. Mientras que en el 2021 MITRADEL tramitó 40% menos nuevos contratos laborales que en el 2019, y en los tres primeros meses del 2022 el porcentaje aumentó a 43%, lo cual es síntoma de que la crisis laboral se está agravando, a su vez indicativo de la incertidumbre en el clima de inversiones en el país.
Existe una enorme potencialidad de mejora. La consolidación de las exportaciones de cobre ha sido recibida con entusiasmo por la comunidad inversionista internacional. Informes recientes de la calificadora de riesgo Fitch Ratings y la banca de inversiones Morgan Stanley dan a la minería un rol protagónico en el crecimiento económico y gestión de las finanzas públicas de Panamá.
Ante la precaria situación financiera del Estado y la severa descapitalización del sector privado nacional, estos pronunciamientos son buenas noticias que deben ser capitalizadas para la construcción del clima necesario para la atracción de Inversión Extranjera Directa (IED) para desarrollar todos los sectores estratégicos (no sólo minería) y generar empleos formales.
Gripalizar la pandemia
Ya no estamos en un Estado de Emergencia Sanitaria, sino Socioeconómica. Por ejemplo, recientemente, República Dominicana, país de más de 10 millones de habitantes, con perfil laboral y educativo similar al panameño, así como 55% de su población vacunada (vs. 72% en Panamá), en febrero 2022 adoptó la decisión de eliminar todas las medidas relacionadas al COVID-19 (Tarjeta de Vacunación, QR, exigencia de vacunación para accesar a sitios públicos, etc.).
Como resultado, en el primer trimestre 2022, 1.71 millones de turistas entraron al país, con 7 millones de confirmaciones para el resto del año, 8.9% por encima del 2019. En el frente sanitario, en la primera semana de febrero 2022 el promedio diario de casos fué 1,223 (3 muertes) y para la última semana de abril 2022 tuvieron 23 diarios, 0 muertes.
“Gripalización” de la pandemia y atracción de inversiones son claves para la generación de empleos. El “enemigo” no es el virus, es el hambre. Pero generar empleos dignos requiere plantearnos cómo generamos confianza para atraer inversiones. Invertir en Panamá TIENE que ser “buen negocio”.