Obispos piden no caer en tentación de la violencia
La Conferencia Episcopal Panameña (CEP) pidió evitar que el ensañamiento se posesione de nuestro país. Panamá es una tierra bendecida por su gente, que ha superado situaciones difíciles, sin perder su vocación de libertad y entrega al servicio del bien común, sostienen los obispos.
Los prelados destacan el dolor que embarga a los panameños, por los hermanos que han perdido la vida durante los días de protestas. Estos episodios jamás deben hacernos olvidar que somos una nación de tradición noble, pacífica, fraterna y solidaria, sostuvo la CEP.
La patria es un don, pero también un compromiso ciudadano ineludible y todos estamos llamados a encontrar los caminos de paz y justicia social, que nos propicien el Panamá que todos nos merecemos, añaden.
Los obispos solicitaron orar al Padre para que no nos deje caer en la tentación de la violencia y pongamos nuestra mirada en aquellos que más necesitan de todos nosotros, y no se merecen un país inestable e inseguro. Invitamos a todos los cristianos y a los hombres y mujeres de buena voluntad, a renovar nuestro compromiso por la paz y a no ser indiferentes ante el dolor que toda confrontación es capaz de causar, concluyen.
El presidente y el secretario general de la Conferencia Episcopal Panameño, Rafael Valdivieso y Manuel Ochogavia, respectivamente participaron el 19 de octubre en una de las primeras marchas que dieron origen a la ola de protestas contra el contrato de Minera Panamá.