Panamá le responde al garrote tico
El Ministerio de Comercio Exterior de Costa Rica informó ayer que suspenderá beneficios arancelarios a Panamá, como respuesta a las restricciones que ese país impone a la importación de tomate costarricense.
Esta medida ocurre un día después de que el ministro de Comercio Exterior de Costa Rica, Manuel Tovar, afirmara que su expectativa es que Panamá entienda "por el garrote", y que están dispuestos a ir a las últimas consecuencias en su demanda ante la Organización Mundial de Comercio (OMC) por este caso.
Las palabras del ministro tico fueron repudiadas por gremios productores en Panamá, mientras que Federico Alfaro Boyd, el ministro panameño de Comercio, dijo que Costa Rica ni ningún país puede impedirle a Panamá aplicar las medidas que sean necesarias para garantizar que los productos que ingresen al país cumplan con los requisitos establecidos.
Alfaro puntualizó que no pondrán en riesgo la salud de los panameños, ni la producción agropecuaria nacional, con la introducción de plagas cuarentenarias que tienen prevalencia en otros países. Actualmente existe un proceso ante la OMC, iniciado por Costa Rica, que eligió un arbitraje, finalizando el diálogo bilateral al que Panamá ha estado siempre dispuesto, añadió.
La Asociación Nacional de Ganaderos (ANAGAN) repudió las declaraciones de Tovar por "insostenibles, pretenciosas y propias de una persona desconocedora del derecho internacional y de las normas del comercio exterior".
Según ANAGAN, el gobierno panameño está actuando en derecho en el marco de las normas del comercio que le garantizan a las naciones librarse de futuras complicaciones por la presencia de plagas y enfermedades indeseadas en los sectores productivos.
En un comunicado conjunto, la Asociación Nacional de Ganaderos capítulo de Chiriquí y la Central de Lecherías Asociadas de Panamá rechazó las "penosas" afirmaciones del ministro Tovar, en las cuales "amenaza de forma lamentable a nuestro país como consecuencia de las decisiones que se forma responsable y apegado a las normativas legales vigentes han tomado las autoridades de Panamá en cuanto a las importaciones de leche y lácteos provenientes de Costa Rica".
La disputa con Panamá inició desde 2020, cuando precisamente se eliminaron los aranceles a los productos lácteos costarricenses como parte del Tratado de Libre Comercio entre ambos países. Se anunció a mediados de ese mismo año el cierre de las fronteras a productos de origen animal provenientes de 26 plantas costarricenses, incluidos los de la cooperativa de productores Dos Pinos.