Planta de energía de la mina podría abaratar costos
Cobre Panamá asegura que su planta tiene el potencial de brindar un apoyo significativo a la red durante la sequía actual.
Tras la orden estatal de cierre de la mina de Cobre Panamá, ubicada en Donoso, provincia de Colón, surgieron una serie de interrogantes sobre el manejo de las diferentes áreas que fueron construidas en su momento para el funcionamiento del proyecto, entre ellas, la planta de energía.
Se trata de una planta que proporciona aproximadamente 300 megavatios, usados en diversas áreas de la mina, entre ellas, la flota eléctrica de camiones, y cuyo excedente también contribuye a la red nacional, mediante su interconexión con la subestación de Llano Sánchez, Aguadulce, provincia de Coclé; sin embargo, hace unas semanas se conoció que dicho proceso ya no está funcionando.
De hecho, el pasado 17 de enero Cobre Panamá hizo público el documento del plan inicial de Preservación y Gestión Segura entregado al Ministerio de Comercio e Industrias (Mici), donde detalla que se está dando mantenimiento y operación a la planta de energía, suministrando energía directa a la mina para actividades de preservación, y que la planta también tiene el potencial de brindar un apoyo significativo a la red durante la sequía actual, "ayudando a aliviar la presión sobre las plantas hidroeléctricas y reduciendo los precios de la energía en el país.
Es precisamente este último dato el que cobra vigencia, ante el deficiente servicio de energía eléctrica en el país, el cual genera constantes quejas y reclamos; sobre todo, porque las nuevas tarifas eléctricas que regirán a nivel nacional durante el primer semestre del 2024 entraron en vigencia desde el pasado 1 de enero, con incrementos que oscilan entre un 2% y un 15%, según la distribuidora de cada cliente. Este ajuste fue aprobado por la Autoridad Nacional de los Servicios Públicos (ASEP) el 28 de diciembre de 2023.
Efectivamente, las autoridades explicaron que dicho aumento se atribuye en parte a los costos de la energía proveniente de las generadoras. Además, destacaron que el Fenómeno del Niño está exacerbando la afectación a la disponibilidad del recurso hídrico, afectando así el funcionamiento de las plantas hidroeléctricas.
Sobre la planta
Para algunos, el tema sigue siendo motivo de debate, pues consideran que no se debería despachar energía de dicha planta al sistema eléctrico nacional, salvo en emergencias, porque la materia prima de la termoeléctrica es el carbón; aunque Cobre Panamá ha informado anteriormente, que la misma está compuesta por dos unidades de 150 MW cada una, y que fue construida para la reducción de emisiones. Desde el diseño, la planta establece cuatro controles medioambientales fundamentales: carbón bajo en azufre, sistema de reducción catalítica selectiva, filtros de ceniza y sistema de purificación de gases. Además, cuenta con un sistema de monitoreo que garantiza que las emisiones, durante su funcionamiento, estarán por debajo de los estándares internacionales, los cuales son incluso menores que los establecidos en la legislación nacional.
A juicio del especialista en gestión y planificación ambiental, Roderick Gutiérrez, si Panamá ya cuenta con una termoeléctrica ya construida, donde el financiamiento fue privado, y está diseñada para generar 300 MW, lo más sensato y más adecuado sería utilizarla y que sea parte del sistema de generación eléctrica del país, ya que tenerlo y no usarlo sería algo contradictorio por lo que está ocurriendo con el Fenómeno del Niño y las hidroeléctricas.
Para Gutiérrez, hay que tener en cuenta que las infraestructuras, la regulación ambiental, tanto nacional como internacional y las normativas existentes, exigen mayor control en lo que es el tema de emanación de gases, en este caso, es que utilizan filtros que tienen la capacidad para reducir la cantidad de partículas que se pueden emitir al aire.
"Ya las termoeléctricas no son la mismas de hace 10, 15 años, donde veíamos humo negro, hoy en día, uno ve que el humo es blanco y ese humo blanco es realmente vapor de agua, que es lo único que está saliendo de esa chimenea, porque todo está realmente contenido dentro de la misma infraestructura y está recirculando y produciendo energía interna.
Al ser consultado sobre la contaminación que se produjo en el caso puntual del incendio del relleno sanitario de Cerro Patacón, cuyo humo acaparó la ciudad de Panamá y una planta termoeléctrica, Gutiérrez recordó que en este último sí hay controles.
"...Tanto la termoeléctrica como el relleno generan gases, pero la gran diferencia es que en uno (termoeléctrica) se mantiene contenido, tiene los filtros adecuados, es legal, cumple con la normativa, y el otro (Cerro Patacón) no; por eso, es que a una termoeléctrica no la dejan que contamine, por la legislación y tecnología que hay hoy en día.