Ulloa: Dios nos trajo al mundo, no para ser desgraciados
El arzobispo de Panamá, José Domingo Ulloa expresó ayer que Dios nos trae al mundo no para ser unos desgraciados, no para morir en las cunetas, no para apagarnos solitarios en la barra de un bar o en la pantalla de un teléfono. Dios nos llama a ser felices y vivir esta vida como un gran don".
En su reflexión dominical, Ulloa invitó a los panameños a darnos tiempo en la vida para amar a quienes nos rodean, porque con demasiada frecuencia subestimamos el poder de una caricia, una sonrisa, una palabra amable, un gesto de comprensión ante quien se equivoca o comete un error, una ayuda limpia y desinteresada, todas estas expresiones son frutos del amor y son capaces de cambiar vida”.
El prelado sostuvo que hoy más que nunca debemos sentirnos profundamente amados por Dios, “descubramos que la verdadera alegría consiste en saber dar y recibir amor, y no olvidemos que solo el que ama ha conocido a Dios y el que no no ama no conoce a Dios, porque Dios es amor”.
Pero el monseñor aclaró que amor es una palabra que usamos mucho, pero que puede llegarse a vaciarse de contenido y por eso el que cree y se siente amado por Dios, el que tiene conciencia de ser hijo de Dios y hermano de Cristo, tiene un programa de vida, clarísimo, tiene que amar a Dios y a los hermanos, es un programa que nos ofrece los mejores ideales.