Noticias - 30/12/20 - 12:30 PM

Apnea del sueño: más que un simple ronquido

Puede ocurrirle a cualquier persona, pero también se puede evitar.

 

Por: Milagros Murillo F. -

Muchas bromas y burlas giran en torno a las personas que roncan; y es que, algunas hacen un ruido tan estruendoso cuando duermen, que llega a ser molesto incluso para quienes se encuentran en habitaciones contiguas. La situación es vista con normalidad, pero detrás hay una serie de riesgos de salud que podrían llevar hasta la muerte.

La esposa de Antonio Herrera (seudónimo) asegura que ha tenido que aprender a dormir con él a pesar de sus fuertes ronquidos, lo que implica tener que despertarse ocasionalmente en la madrugada. Ellos tienen 12 años de casados y en los últimos cinco, cuando este empezó a aumentar de peso, se iniciaron los episodios nocturnos de apnea del sueño. “A veces tengo que despertarlo, porque siento que se está quedando sin respiración”, admite la señora, quien ya ha empezado a buscar ayuda profesional. El primer consejo que le dieron es que su esposo baje de peso.

El doctor José Antonio Lorenzo Palma, especialista en otorrinolaringología de la Caja de Seguro Social (CSS), definió la apnea del sueño como la falta u obstrucción de la respiración durante el sueño, condición que puede ser desde la nariz como en la faringe o laringe (generalmente es en varios puntos), lo que provoca que se interrumpa por unos segundos el flujo del aire de la respiración de la persona.

El ronquido sonoro es el síntoma más común de la apnea, acompañado de pausas respiratorias; sin embargo, la persona a quien le ocurren estos episodios no se da cuenta de ello, sino su pareja o compañero de cama.

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Contrario a los pensamientos populares de que quien ronca es porque duerme plácidamente, el individuo que sufre de apnea del sueño sentirá cansancio durante el día, somnolencia, pues el sueño es poco reparador, además de dolores de cabeza, dificultad de concentración, aumento del apetito como una necesidad constante de mantenerse activo para no quedarse dormido.

Pero ojo, no todo el que ronca tiene apnea, aclara el especialista, pues el ronquido es una etapa inicial de la condición, pero quien ronca y no se atiende a tiempo puede a la larga caer en la apnea obstructiva del sueño.

Hombres obesos son los más propensos

La apnea obstructiva del sueño puede aparecer en cualquier persona, detalla el doctor Lorenzo, puede darse en personas con malformaciones craneofaciales, ya sea congénitas u ocasionadas por algún trauma (golpe) o fractura, así como a personas con rinitis crónica, sinusitis, pólipos y hasta en niños. Pero hace especial hincapié en que se ha comprobado que es más común en los hombres a partir de los 40 años y con obesidad.

Llama la atención que datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) apuntan a que desde 1975 la obesidad casi se ha triplicado en todo el mundo, lo que indica que millones de personas pudieran estar en riesgo.

En ese sentido, el Instituto Europeo del Sueño con sede en Panamá, Chile y España, se refiere a que la acumulación de grasa a nivel del cuello dificulta el paso del aire por la noche hacia los pulmones. Su director internacional, Diego García-Borreguero, sostuvo que “la obesidad es un importante factor de riesgo para el desarrollo de la apnea del sueño, estando presente en el 60-90% de los pacientes con síndrome de apneas-hipopneas del sueño”.

Diagnóstico y control

Ante la sospecha de la apnea y la desmejora en la calidad del sueño, se debe acudir al médico, recomienda el doctor Lorenzo, quien explicó que el caso es evaluado por varios especialistas. En su caso, como otorrino le corresponde evaluar la vía aérea superior con diversos exámenes físicos, el neumólogo trata la parte respiratoria, el neurólogo la parte del cerebro, los estudios del sueño y la llamada polisomnografía, que es una prueba de diagnóstico del sueño que evalúa parámetros fisiológicos durante el sueño y determina si se trata de una apnea (y su severidad), si es un ronquido o roncopatía primaria.

Apnea y accidentes cerebrovasculares

La apnea del sueño aumenta la probabilidad de desarrollar un sinfín de enfermedades como hipertensión, diabetes, obesidad, sobrepeso, hipertensión pulmonar, depresión, ansiedad, trastornos del apetito y entre las enfermedades vasculares los accidentes cerebrovasculares.

Según la Organización Mundial de la Salud, las enfermedades cardiovasculares (principalmente las cardiopatías y los accidentes cerebrovasculares) fueron la principal causa de muertes en 2012.

“La apnea de sueño aumenta la probabilidad de que se den estas condiciones o en una persona que ya las presenta aumenta la posibilidad de que se complique o sean de un manejo más difícil”, dijo el doctor José Lorenzo.

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En tanto, García-Borreguero afirma que “aunque se trate de una condición muy frecuente en la población, cuando la apnea es severa, se produce un aumento del riesgo de enfermedades cardiovasculares como la hipertensión arterial, riesgo incrementado de angina de pecho, incluso infarto y accidente cerebrovascular. Este último, una de las principales causas de discapacidad y muerte a nivel global, se asocia con frecuencia a la apnea del sueño”. De hecho, acotó que más del 40% de los pacientes con apnea sufren de hipertensión.

Recomendaciones

Una serie de recomendaciones da Lorenzo, especialmente a las personas obesas, para que en primera instancia bajen de peso para lograr un peso ideal y aunque no sea obeso, se insta a tener estilos de vida saludables, alimentación balanceada de acuerdo a sus requierimientos diarios de calorías, así como realizar actividad física entre tres y cinco días a la semana, dependiendo de la edad de la persona, su condición física y demás factores.

Asimismo, García-Borreguero recomendó acudir a tiempo donde los especialistas antes de que la apnea se vuelva severa y así prevenir problemas mayores.

 

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