Demostró que sí se puede con su juventud
El futuro se vislumbra prometedor, pese a que gobernar para más de 4 millones de panameños, no es una empresa fácil, toda vez que habrá que enfrentar con honor y profesionalismo, a detractores, críticos y adversarios políticos, que estarán más pendientes de los errores, que de los éxitos.
Sin duda alguna, que el resultado estrecho de las elecciones del pasado domingo 5 de mayo en Panamá, marcarán un precedente trascendental en la historia política del istmo panameño.
El trabajo desarrollado por los estrategas de comunicación de la campaña mediática del hoy presidente electo Laurentino “Nito” Cortizo, sin temor a equivocarnos fue casi como una "tormenta perfecta" que revolucionó no solo la candidatura en el plano presidencial, sino que impactó significativamente las áreas legislativas, municipales y de representación de corregimientos.
Detrás de la campaña “Uniendo Fuerzas” hay toda gama de jóvenes profesionales, liderado por el hoy vicepresidente de la la República Gabriel Cartizo.
Este grupo de expertos logró consolidar y unificar el voto hacia el Partido Revolucionario Democrático (PRD) a nivel nacional, la diversidad de elementos comunicacionales aplicados fortaleció las estructuras del colectivo y lo enrumbó hacia un triunfo seguro y consistente, fundamentados en el control de la intensidad política y la aplicación de la inteligencia emocional en cada movimiento.
El referido factor emocional, fue la plataforma principal para el manejo de la campaña comunicacional de forma exitosa y garantizó el comportamiento maduro y acertado de los más de 400 mil miembros de un histórico PRD, formado en el ideario de desaparecido Omar Torrijos, uno de los grandes protagonistas de la Reversión del Canal de Panamá a el control y manos panameñas.
A pesar las presiones internas y externas el PRD, mantuvo una actitud ecuánime, gracias al manejo profesional de la campaña mediática, por los creadores y orquestadores de la actividad comunicacional.
Luego de casi 5 días de la celebración de los comicios nacionales, propios y extraños reconocen la efectividad del majeño administrativo de la campaña, fortalecido en la mística del equipo supervisor y director de la cruzada de comunicación, que logró conciliar posiciones equidistantes, que al final permitió unir voluntades en el interés del alcanzar el triunfo en el proceso.
El futuro se vislumbra prometedor, pese a que gobernar para más de 4 millones de panameños, no es una empresa fácil, toda vez que habrá que enfrentar con honor y profesionalismo, a detractores, críticos y adversarios políticos, que estarán más pendientes de los errores, que de los éxitos.
Pase lo que pase, el diálogo frontal y sencillo, debe prevalecer durante los próximos cinco años del gobierno de Laurentino “Nito” Cortizo, que sabemos que obtendrá grandes éxitos con pinceladas de algunas equivocaciones que son parte de todo proyecto de gobierno, que se inicia cada cinco años.
Gabriel Carrizo dejó muestras fehacientes de su capacidad al dirigir una campaña presidencial, ahora le tocará hacer lo propio dentro del engranaje estatal, siempre amparado en la unidad, reconciliación de todos los panameños, que esperan con ansias nuevas oportunidades de progreso personal y de la nación panameña.