Día Mundial de la Lucha contra la Depresión
Esta es una enfermedad real y multicausal de la cual nadie está exento de padecer y que requiere de atención profesional idónea toda vez que, su cronicidad puede inhabilitar a quien la padece de hasta las más básicas tareas rutinarias.
A propósito del Día Mundial de la lucha contra la Depresión, hoy 13 de enero, día cuyo objetivo principal es el de crear conciencia, orientar y sensibilizar respecto a una enfermedad que, según la Organización Mundial de la Salud, afecta a más de 300 millones de personas a nivel mundial constituyéndose en un claro problema de salud pública; estimo conveniente no dejar pasar este día desapercibido.
Siendo que, la depresión es una enfermedad real y multicausal de la cual nadie está exento de padecer y que requiere de atención profesional idónea toda vez que, su cronicidad puede inhabilitar a quien la padece de hasta las más básicas tareas rutinarias afectando cada uno de los aspectos de su vida diaria. También cabe destacar que debido al tabú que existe respecto a la salud mental, se han generado diversos mitos acerca de la depresión, pero lo cierto es que ésta puede presentarse en distintas formas más allá de “sentirse triste”.
Pérdida del apetito, insomnio o hipersomnio, irritabilidad, apatía, desgano por mencionar unos cuantas, son síntomas característicos que pueden ser exhibidos durante un episodio depresivo; esto puede ocasionar que la enfermedad sea indetectable a simple vista. A nivel biológico, la unidad celular del cerebro, denominada neurona, se comunican las unas a las otras a través de un proceso llamado sinapsis el cual involucra una serie de sustancias conocidas como neurotransmisores: la serotonina, dopamina, acetilcolina que se encargan de transmitir información de una neurona a otra y asegurar el adecuado funcionamiento de las redes neuronales sin embargo, el desbalance de estos neurotransmisores puede provocar afectaciones dentro de los procesos mentales y causar entre otras cosas enfermedades como la depresión.
Muy a groso modo, se deja entrever que la depresión no es cosa de “echarle ganas” o “tener actitud positiva” es un padecimiento clínico que ha llegado a costar la vida de millones de personas quienes en su momento no tuvieron acceso a atención profesional ya sea por el estigma, desconocimiento o simplemente miedo. Quienes estén pasando por un episodio depresivo sea cual sea las circunstancias les exhorto a pedir ayuda, respiren profundo y hablen; al resto no nos viene mal ser más receptivos y empáticos pues nadie sabe las batallas internas por las cuales están pasando otros.