Provincias - 27/2/18 - 05:45 PM

Alarma en Barú por presencia de serpientes marinas

Las serpientes se sido ubicada en playas como: Corazón de Jesús y Las Mellizas, pero de igual forma se monitorea las playas de Los Olivos, El Porvenir y San Vicente.

Estas serpientes habitan en los litorales costeros del océano Pacífico, dentro de los límites tropicales y subtropicales. / Foto: Mayra Madrid

Por: Mayra Madrid / Web - Martes 27 de Febrero de 2018 5:45 PM

MI AMBIENTE en la provincia de Chiriquí, continúa detectando la presencia de especies de serpientes marinas en las playas del distrito de Barú, lo que mantiene alarmada a los bañista y pescadores del sector.

Se ha emitido una alerta amarilla y la vigilancia por parte de Mi AMBIENTE en Barú, Servicio Nacional de Fronteras (Senafront) y Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc) de ante la presencia de más de 35 especies de estas serpientes, científicamente conocidas como Hydrophis platurus o serpientes marinas amarillas.

Las serpientes se han ubicado en playas como: Corazón de Jesús y Las Mellizas, localizadas en el corregimiento de Puerto Armuelles; sin embargo, dentro del operativo se incluyen las playas de Los Olivos, El Porvenir y San Vicente, todas ubicadas en el distrito de Barú.

Las autoridades continúan la supervisión técnica bajo los parámetros de bandera amarilla en labor interinstitucional en conjunto con pescadores del sector que continúan ubicando más de estas serpientes.

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Estos ofidios que son portadores de un veneno tóxico para el ser humano, poseen una cabeza alargada, aplanada y estrecha, con ojos de tamaño medio y pupilas redondeadas, en su parte posterior son de color marrón y un lado ventral amarillo al igual que la cola la cual además posee manchas negras.

Estos reptiles habitan en los litorales costeros del océano Pacífico, dentro de los límites tropicales y subtropicales, aunque días atrás se reportó su presencia en las costas de las provincias centrales.

A estas especies de serpientes les gusta nadar en la superficie y solo se sumergen para comer peces, crustáceos, etc. y pueden permanecer hasta ocho horas bajo el agua por lo que es posible que tenga contactos con humanos que utilizan las playas con fines de recreación o por actividades de pesca de subsistencia.

La Dirección Regional de Mi AMBIENTE solicita a los bañistas y pescadores estar muy atentos ante cualquier contacto con ellas.