Confirman cinco casos de lepra en Chiriquí
La epidemióloga Isela Rentería reveló que el primer caso de lepra en Chiriquí fue registrado en el año 1980. Desde entonces, se han diagnosticado un total de 34
Cinco casos activos de lepra fueron confirmados hoy, en la provincia de Chiriquí por las autoridades del Ministerio de Salud (Minsa). Este incremento en el número de casos anuales ha generado inquietud entre la población.
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La directora regional del Minsa, la doctora Gladys Novoa, informó que si bien los pacientes diagnosticados con lepra están recibiendo tratamiento, la duración del mismo puede extenderse durante varios años.
Esta situación plantea un desafío para el sistema de salud, ya que se requiere una atención integral y a largo plazo para garantizar una recuperación exitosa.
Amelia Martiz, coordinadora del Programa Nacional para el Control de la Lepra, destacó que desde la implementación de la guía para el abordaje integral de los pacientes con lepra en 2018, se ha observado un significativo aumento en los casos diagnosticados anualmente en comparación con los dos o tres casos registrados anteriormente.
Ante esta situación, Martiz enfatizó la importancia de un trabajo conjunto entre epidemiólogos, dermatólogos y directores médicos de unidades ejecutoras del Ministerio de Salud y la Caja de Seguro Social (CSS) en Chiriquí, con el objetivo de diagnosticar, registrar y dar seguimiento adecuado a cada caso de lepra.
La epidemióloga Isela Rentería reveló que el primer caso de lepra en Chiriquí fue registrado en el año 1980. Desde entonces, se han diagnosticado un total de 34 personas con esta enfermedad en la región.
A pesar de ser una enfermedad crónica, es importante destacar que la lepra tiene cura y que en Panamá se ofrece tratamiento gratuito para los pacientes afectados.
Los signos de la lepra suelen manifestarse a través de lesiones en la piel, que pueden aparecer a partir de los seis meses desde la exposición inicial. Esta enfermedad representa un desafío para los profesionales de la salud, ya que requiere una detección temprana y un tratamiento adecuado para evitar su propagación.