Show - 20/4/22 - 02:45 PM
El Rey Momo recibe las llaves de Río y el Carnaval vuelve a la vida
Luego de ser cancelado por primera vez en su historia en 2021, la expectativa que se vive por el regreso de la más icónica fiesta de Brasil es alta.
El Carnaval de Río de Janeiro, el más famoso del mundo y cancelado en 2021 por la covid-19, volvió oficialmente a la vida este miércoles tras decretarse cinco días de fiesta por su máximo regente, el Rey Momo.
LEE TAMBIÉN: Avión de Farruko aterriza de emergencia; él le da gracias a Dios
El soberano recibió las llaves de la ciudad de manos del alcalde de Río, Eduardo Paes, quien celebró el regreso del "mayor símbolo" del país y la "más grande manifestación cultural del planeta", en una ceremonia simbólica, en el Palacio municipal, que estuvo cargada de samba, color y alegría.
"Yo como rey de los fiesteros declaro abierta la mayor manifestación cultural y popular del mundo, que es el carnaval carioca", decretó el locutor Wilson Dias da Costa, Rey Momo del Carnaval de Río y quien a sus 35 años levanta la corona de la máxima celebración brasileña por quinta vez.
"¡Viva la samba, viva la cultura popular brasileña, viva el carnaval carioca!", agregó el regente, que tendrá el comando de la "cidade maravilhosa" hasta las primeras horas del próximo lunes.
Luego de ser cancelado por primera vez en su historia en 2021, la expectativa que se vive por el regreso de la más icónica fiesta de Brasil es alta.
Este año, sin embargo, el carnaval será atípico en Río de Janeiro, pues además de realizarse casi dos meses después de sus fechas habituales, no contará con los famosos "blocos", como se denomina a las bandas y comparsas que desfilan gratuitamente por las calles de la ciudad y que son considerados alma y vida del festejo.
Los que sí están confirmados son los desfiles del Sambódromo, que año tras año se roban las primeras páginas de la prensa, con la creatividad de las escuelas de samba del Grupo Especial y con la energía que derrochan las esculturales "garotas" con sus frenéticos bailes.
Para compensar la ausencia de los "blocos" se ha programado un sinfín de fiestas privadas con ambiente de carnaval.
La idea es que los festejos se realicen a puerta cerrada para evitar aglomeraciones que no puedan ser controladas, pues aunque el 73 % de los brasileños cuenta con el esquema completo de vacunación contra el virus, las autoridades municipales prefirieron autorizar eventos donde se pueda fiscalizar la inmunización de los asistentes, algo imposible de controlar en espacios abiertos.
SE PRENDE LA FIESTA
Pese a que la municipalidad ha reiterado que no está autorizada la participación de "blocos" en las calles de Río, varias de estas comparsas han anunciado su salida a "las rúas" por las redes sociales.
Los "folioes", como se conoce en Brasil a quienes se gozan el carnaval, ya se ven en los almacenes de disfraces comprando los aditamentos para salir a bailar desde este miércoles y, pese a las restricciones de las autoridades, repetir la fiesta que iniciaron a finales de febrero, en las fechas en las que se habría realizado el Carnaval si no hubiese sido aplazado por la covid-19.
Ante la insistencia de los cariocas de llevar la fiesta "a las rúas", el alcalde dijo que no aplicarán sanciones a quienes salgan a divertirse en Río, pero pidió prudencia, comprensión con el tráfico y "limpieza".
"Yo como rey de los fiesteros declaro abierta la mayor manifestación cultural y popular del mundo, que es el carnaval carioca", decretó el locutor Wilson Dias da Costa, Rey Momo del Carnaval de Río y quien a sus 35 años levanta la corona de la máxima celebración brasileña por quinta vez.
"¡Viva la samba, viva la cultura popular brasileña, viva el carnaval carioca!", agregó el regente, que tendrá el comando de la "cidade maravilhosa" hasta las primeras horas del próximo lunes.
Luego de ser cancelado por primera vez en su historia en 2021, la expectativa que se vive por el regreso de la más icónica fiesta de Brasil es alta.
Este año, sin embargo, el carnaval será atípico en Río de Janeiro, pues además de realizarse casi dos meses después de sus fechas habituales, no contará con los famosos "blocos", como se denomina a las bandas y comparsas que desfilan gratuitamente por las calles de la ciudad y que son considerados alma y vida del festejo.
Los que sí están confirmados son los desfiles del Sambódromo, que año tras año se roban las primeras páginas de la prensa, con la creatividad de las escuelas de samba del Grupo Especial y con la energía que derrochan las esculturales "garotas" con sus frenéticos bailes.
Para compensar la ausencia de los "blocos" se ha programado un sinfín de fiestas privadas con ambiente de carnaval.
La idea es que los festejos se realicen a puerta cerrada para evitar aglomeraciones que no puedan ser controladas, pues aunque el 73 % de los brasileños cuenta con el esquema completo de vacunación contra el virus, las autoridades municipales prefirieron autorizar eventos donde se pueda fiscalizar la inmunización de los asistentes, algo imposible de controlar en espacios abiertos.
SE PRENDE LA FIESTA
Pese a que la municipalidad ha reiterado que no está autorizada la participación de "blocos" en las calles de Río, varias de estas comparsas han anunciado su salida a "las rúas" por las redes sociales.
Los "folioes", como se conoce en Brasil a quienes se gozan el carnaval, ya se ven en los almacenes de disfraces comprando los aditamentos para salir a bailar desde este miércoles y, pese a las restricciones de las autoridades, repetir la fiesta que iniciaron a finales de febrero, en las fechas en las que se habría realizado el Carnaval si no hubiese sido aplazado por la covid-19.
Ante la insistencia de los cariocas de llevar la fiesta "a las rúas", el alcalde dijo que no aplicarán sanciones a quienes salgan a divertirse en Río, pero pidió prudencia, comprensión con el tráfico y "limpieza".