Show - 25/4/20 - 12:30 PM

Pareja de enamorados estuvo en alta mar y nunca se enteró del coronavirus

“No queremos dejar San Vicente por ahora, ya que no hay ningún lugar abierto. Estamos acá por el momento con el objetivo de salir antes de que comience la temporada de huracanes a principios de junio”, afirmó

 

Por: Redacción / Web -

Una pareja de soñadores se llevaron la sorpresa de su vida al enterarse de la pandemia del coronavirus, luego de estar 25 días navegando en el  mar y desconectados completamente del mundo.

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Elena Manighetti y Ryan Osborne, tomaron la decisión de abandonar a inicios de febrero de este año, además, se impusieron varias reglas, entre las que estaban pedirle a sus familiares que se mantuvieran en contacto, pero pusieron como regla que no les transmitieran malas noticias mientras ellos estuviesen en altamar.

Tras recorrer miles y miles de millas marinas, la pareja que vivía en Manchester, cruzó el océano Atlántico desde las Islas Canarias hasta el Caribe el mes pasado mientras, sin que ellos lo supieran, el coronavirus se apoderaba de las tranquilidad del mundo entero.

Luego de navegar mucho, los ingleses planeaban atracar a mediados de marzo en San Vicente, una pequeña isla al norte del caribe venezolano, pro cuando recuperaron la señal de teléfono, mientras todavía navegaban por la costa, descubrieron que las fronteras de la isla estaban cerradas y que el mundo atravesaba una pandemia de la que no habían oído nada.

En febrero habíamos tenido noticias de un virus en China, pero con la poca información que tuvimos luego imaginamos que al llegar al Caribe todo habría terminado”, relata Elena. Y Ryan agrega que entendieron la magnitud de la pandemia cuando les informaron que no podrían anclar en la isla.

Les dijimos a nuestros contactos en tierra que no queríamos escuchar malas noticias”, recuerda Elena, cuya familia es de Lombardía, la región más afectada de Italia. “Primero intentamos atracar en uno de los territorios franceses en el Caribe, pero cuando llegamos descubrimos que todas las fronteras estaban cerradas y que las islas no permitían el ingreso”, añade Ryan. Pensaron que sería cuestión de días para que los dejaran pisar tierra firme.

De vuelta en su bote, la pareja desvió su viaje a Granada y finalmente llegó a un área en el mar donde su señal 4G fue lo suficientemente buena como para entender lo que estaba sucediendo. Recién ahí empezaron a acopiar datos, información e imágenes de todo el mundo y entendieron todo.

De vuelta hacia San Vicente, algo los ayudó. “Una amiga nuestra ya estaba en San Vicente, que es donde pretendíamos dirigirnos. Nos las arreglamos para ponernos en contacto con ella 10 horas antes de llegar al muelle. Nos dijo que nos negarían la entrada ya que soy ciudadana italiana, a pesar de que no había estado en Italia en meses”, cuenta Elena. 

Tras mostrar ese historial del viaje y demostrar que venían de estar casi un mes navegando en el Océano Atlántico los dejaron desembarcar, aunque llegaría otro paso dramático. Elena tenía que llamar su familia para enterarse de cómo estaban las cosas allí.

“Mi ciudad natal está en la región italiana de Lombardía, que ha sido una de las más afectadas en el mundo. MI padre me dijo en el teléfono que no entrara en pánico y me envió un perfil del New York Times de nuestra ciudad, lo que hizo que todo se sintiera repentinamente real. Me sorprendió”, comenta ella.

Tras ver las imágenes de ataúdes recorriendo sus tierra y las de los médicos exhaustos, Elena pudo tranquilizarse al saber que los suyos estaban bien.

Afortunadamente mi familia está segura en casa y estuvo encerrada durante más de seis semanas, pero personas que conocemos desde hace años han muerto”, añade. Ahora Elena y Ryan están a salvo en Bequia, San Vicente, pero los preocupa cuánto tiempo más podrán permanecer allí.

“No queremos dejar San Vicente por ahora, ya que no hay ningún lugar abierto. Estamos acá por el momento con el objetivo de salir antes de que comience la temporada de huracanes a principios de junio”, afirmó

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