Ordenan detención a cubano por estafa y clonación de tarjetas
Michelle Duarte, pidió perdón a su víctima alegando estar dispuesto a devolver del dinero cobrado, indicando además que todo el equipo encontrado en su casa es parte de su trabajo de compra y venta de equipos informáticos.
El Ministerio Público en la provincia de Panamá Oeste imputó hoy al cubano Michelle Duarte Suárez, detenido el pasado 2 de noviembre durante la operación “Emperador”, cargos por los delitos de estafa y asociación ilícita para delinquir.
Duarte Suárez fue aprehendido en el distrito de Arraiján, a raíz de una investigación por la venta de un vehículo robado en Costa Rica e introducido al país ilegalmente y posteriormente vendido, a través de una página de internet.
La víctima de la estafa, cuya vivienda fue allanada en dos ocasiones por la Autoridad Nacional de Aduanas y la Dirección de Investigación Policial por la posesión del vehículo, fue quien interpuso la denuncia.
Por la compra del vehículo, tipo pick up, la víctima pago través de un cheque 20 mil dólares al ciudadano cubano.
La fiscalía regional del Panamá Oeste, sustentó la existencia una presunta red de venta de autos robados, en la que, supuestamente, participa el imputado y otras personas, las cuales se hacen pasar por dueños de los vehículos en venta.
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Las investigaciones del Ministerio Público relacionan al ciudadano cubano la inscripción de otros tres autos en el Municipio de Colón y la presunta falsificación de documentos para realizar las ventas.
La juez de Garantías admitió además la solicitud de medida cautelar de detención provisional en contra de Duarte Suárez, pedida por el Ministerio Público.
Ello debido a que éste mantiene un oficio de conducción del juzgado Decimocuarto por el uso indebido de tarjetas de crédito.
Además de estar vinculado a otro expediente por la supuesta clonación de tarjetas de crédito, en el distrito de Arraiján, en donde tras un allanamiento se ubicaron impresoras, cintas magnéticas, computadoras, discos duros y varias tarjetas de bancos.
Al final de la audiencia, Michelle Duarte, pidió perdón a su víctima alegando estar dispuesto a devolver del dinero cobrado, indicando además que todo el equipo encontrado en su casa es parte de su trabajo de compra y venta de equipos informáticos.