Realizan audiencia a implicados en red de tráfico de migrantes asiáticos
El pasado martes, el Ministerio Publico junto con la Policía Nacional desarticularon una red internacional dedicada al tráfico ilícito de migrantes.
Hoy, jueves, se realiza la audiencia por el caso de tráfico de migrantes asiáticos en el Sistema Penal Acusatorio (SPA), plaza Agora.
Esta audiencia fue suspendida ayer para que los abogados defensores revisarán la carpetilla del caso.
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El pasado martes, el Ministerio Publico junto con la Policía Nacional desarticularon una red internacional dedicada al tráfico ilícito de migrantes. Este mismo operativo se desarrolló en Costa Rica.
Esta banda está integrada por nacionales y extranjeros.
Desarticulan red de trata de asiáticos
El cabecilla de una organización criminal dedicada al tráfico ilegal de migrantes asiáticos y siete de sus compinches fueron detenidos por las unidades policiales en coordinación con la Fiscalía contra el Crimen Organizado, mediante la operación internacional “Cielo y Tierra”, realizada en cinco provincias del país y en Costa Rica, simultáneamente.
De acuerdo con el subdirector de la Policía Nacional, Jacinto Gómez, la operación contra el tráfico ilegal de inmigrantes se llevó casi 12 meses de investigación.
En Costa Rica se efectuaron 29 aprehensiones y cuarenta diligencias.
“Aquí en Panamá, decomisamos 75 mil dólares, 7 vehículos y documentos como transferencias de dinero producto de la actividad ilícita”, reveló el fiscal contra el crimen organizado David Mendoza.
El funcionario de instrucción confirmó que las víctimas eran de origen asiático, entre ellas un menor de edad, y que en Panamá fueron rescatadas seis personas y en Costa Rica ocho.
En Panamá se desarrollaron simultáneamente al menos quince diligencias de allanamientos en las provincias Panamá, Panamá Oeste, Coclé, Chiriquí y Colón. Además, se recuperaron dos pistolas 9 milímetros, sin el permiso correspondiente.
La captura del supuesto cabecilla del grupo criminal se dio en un hotel en Punta Pacífica, del corregimiento San Francisco, donde operaba, mientras que su colaborador fue aprehendido en la provincia de Coclé, donde mantenía una empresa distribuidora como fachada para su actividad ilícita, según se conoció.
Las investigaciones revelaron que los miembros de la organización cobraban sumas de entre 25 mil y 30 mil dólares para la movilización de cada persona procedente del continente asiático.